Lugares que no te puedes perder en Nueva York

La ciudad de Nueva York tiene mil rincones que descubrir, pero hay varios sitios que son imprescindibles cuando uno visita la gran manzana. Aunque ya visteis en el vídeo de ComeDestinos TV que pateamos mucho la ciudad, en este post me quiero centrar en las visitas estrella de la ciudad por las que hay que pagar entrada, pero hay muchas otras (y gratis) de las que hablaré más adelante. De momento me centro en las siguientes, para las cuales hay que preparar la cartera:

Mirador Empire State Building

La silueta del Empire State es la más representativa y famosa de todos los edificios de Nueva York, y con sus 443 metros es el segundo más alto de la ciudad, por detrás del One World Trade Center (el edificio que se ha levantado al lado de donde se ubicaban las Torres Gemelas). Al entrar nos recibe la figura de un personaje mítico de este edificio por las películas, King Kong :P.La subida en el ascensor es tan rápida que hasta se taponan los oídos, y llega hasta la planta 86 donde se encuentra el primer mirador (hay otro en el piso 102 pero con recargo adicional). Las vistas son espectaculares. Subimos por la mañana porque teníamos una entrada que nos permitía subir también el mismo día por la noche, pero al final se nos hizo tarde y como estábamos lejos no nos dio tiempo, por lo que lo ideal es subir al atardecer para ver las vistas de día y de noche con todo iluminado, que tiene que ser brutal. La vista nocturna nos queda pendiente para la próxima.

MoMA (Museum of Modern Art)

El Museo de Arte Moderno es una visita que no deja indiferente a nadie. Nosotros de arte no entendemos nada, pero pasamos un rato divertido paseando por las galerías en las que conviven cuadros de Van Gogh o Dalí con obras de lo más estrambóticas que perfectamente podría haberlas hecho… un niño de tres años. También se exponen trabajos de fotografía, arquitectura y diseño gráfico. Nos guste o no, está considerado el museo de arte moderno más importante del mundo.

Mirador Top of the Rock (Rockefeller Center)

Si te preguntas que edificio tiene mejores vistas, el Empire State o el Rockefeller, y no tienes tiempo de subir a los dos, recomendamos totalmente el Rockefeller Center. El Top of the Rock, como se conoce al mirador, es para nosotros sin duda el lugar con mejores vistas de la ciudad. Mientras el ascensor sube se proyecta un vídeo en el techo, que es transparente, y una vez arriba tiene tres alturas diferentes a las que se puede acceder. La primera es acristalada, y las dos siguientes al aire libre. Al asomarnos a la cara norte vemos como se extiende Central Park, el gran pulmón de la ciudad perfectamente delimitado por la marea de edificios, y por la cara sur la otra parte de Manhattan con la zona financiera de fondo y el imponente Empire State en primer plano. Impresionante. Este mirador tiene menos altura que el Empire, pero se compensa por su excelente ubicación.

En los bajos del Rockefeller hay un centro comercial con tiendas y restaurantes, y los estudios del canal de televisión NBC. En el exterior se expone el gran árbol y la pista de patinaje sobre hielo en navidades, tiene que ser una pasada verlo, el resto del año el lugar lo ocupan terrazas de restaurantes que es lo que vimos.

Crucero a la Estatua de la Libertad

La Estatua de la Libertad es el símbolo por excelencia de Nueva York, y coger el ferry que lleva hasta la isla es una experiencia que hay que vivir. La estatua fue un regalo de los franceses a los estadounidenses en 1886 y es el emblema de la Delcaración de la Independencia de los Estados Unidos, precisamente la tablilla que sostiene la gran dama de 46 metros tiene grabada la fecha de la firma de la declaración. Se puede visitar el mirador de la corona, pero eso hay que reservarlo con antelación. Lo que nosotros hicimos fue admirarla desde abajo y dar una vuelta completa a la isla, desde la que también se tienen unas vistas fabulosas de Manhattan. Tras un descansito en la pradera de césped pillamos el ferry de vuelta, donde de regreso al puerto se tienen los edificios muy cerca con muy buenas vistas.

Museo de Historia Natural

Es una visita muy recomendada tanto si viajas con niños como si no, ya que se trata de uno de los museos más grandes e importantes del mundo. Contiene una enorme colección de más de treinta millones de objetos expuestos y puede que os resulte familiar por la película de Ben Stiller “Una noche en el museo”. Merece la pena explorar las galerías de los animales disecados, el planetario, la exposición de culturas del mundo y la sala más popular de todas, la de los esqueletos de dinosaurios, que me encantó.

Si tenéis pensado visitar todas estas atracciones tened en cuenta que en lugar de comprar los tickets individuales, con la City Pass de New York que incluye la entrada a todos estos sitios os ahorraréis un buen dinero (hasta un 43%), nosotros la utilizamos por cortesía de Turismo de Nueva York y va genial.

Hasta la próxima, y recordar que podéis seguir nuestra vuelta al mundo a través de nuestro perfil en redes sociales: Twitter, Facebook e Instagram.